lunes, 9 de julio de 2012

Los damnificados de España


Por Halftown

Capdevila
El último en unirse a esta lista. El lateral catalán, titularísimo en la Euro 2008 y en el Mundial 2010, decidió el pasado verano irse a ganar pasta al Benfica. La cosa empezó a torcerse cuando el 1 de septiembre el club anunció que Capdevila no formaba parte de la lista del equipo portugués para jugar la Champions League. En Da Luz, el enésimo brasileño llamado Emerson le quitó el sitio hasta el punto de que Capdevila acabó la temporada con doce partidos en las botas. Hoy los aficionados se preguntan si había vida antes de Jordi Alba.

Senna
Marcos Senna fue, para muchos, el mejor jugador de España en la Euro 2008. Senna llegó al campeonato como el jugador más veterano del equipo, y se pasó el torneo cubriendo las espaldas de Xavi y compañía, cuando Xabi Alonso lijaba los asientos de Austria y Viena y el doble pivote aún no era el enésimo cisma nacional.
Hoy, mucha gente mete a este campeón de Europa en el mismo lote que a futbolistas irrelevantes con la selección como Donato o Catanha.

Cazorla
¿Cazorla? Se preguntará más de un lector. Pues sí, Cazorla. Convocado por primera vez para la selección en la lista de Luis para la Euro 2008, el otro asturiano de la Roja llegó a jugar cinco partidos en Austria y Suiza. Sin embargo, como su compañero en Villarreal Senna, se quedó fuera de la lista de Del Bosque para la Copa del Mundo en Sudáfrica (aunque sí estuvo en aquella miserable Copa de Confederaciones).
Un tío que ha ganado dos eurocopas y se ha quedado sin Mundial entre ambas, merece un sitio en esta lista. Porque, de pequeño, nadie sueña con ganar un campeonato de Europa.

Tamudo
Los expertos dicen que sólo 20.000 espectadores vieron el nacimiento de la España actual. Aquel 13 de octubre de 2007, Dinamarca y España se jugaban la clasificación para la Eurocopa 2008. En el equipo danés, los clásicos de siempre: Sorensen, Poulsen, Tomasson, Gronkjaër. En el español, los que hoy ya son clásicos: Casillas, Ramos, Xavi, Iniesta. Sólo que en punta no estaba ni Villa ni Torres, sino Raúl Tamudo, que marcó el primer gol de aquel 1-3. Sería su último gol con España. Mientras sus compañeros de aquella noche danesa levantaban la tercera copa consecutiva, Tamudo era presentado con el Pachuca mexicano que entrena Hugo Sánchez. Quién sabe, quizá éste se lo lleve al Madrid cuando por fin le llamen para sustituir a Mourinho.

Sergio García
Vamos a decirlo: nadie entiende muy bien qué pintaba Sergio García en la convocatoria de Luis Aragonés para la Euro 2008. Un jugador anodino, de esos que sólo una temporada ha marcado más de diez goles, al Portillo de Barcelona hay que reconocerle el mérito de haber hecho carrera en Primera. Afortunadamente, Sergio García y su coleta no llegaron a jugar un minuto de rojo en toda la Euro. Ni nunca más.

Raúl
Con él España perdía. Sin él España gana. Información, no opinión.

Joaquín
Cuando llegó Luis, su primera idea fue jugar con extremos sevillanos: Reyes por la izquierda, Joaquín por la derecha. Hoy, otro extremo sevillano, Navas, hace las veces de desatasca bandas cuando Del Bosque lo considera oportuno. “La finta y el esprín”, como anunciaba a Joaquín la megafonía del Villamarín, no ha vuelto a jugar un partido con España desde 2007. Ni falta que hace.

Albelda
David Albelda era la clave de bóveda de aquella parida monumental que Luis Aragonés llamó el “pasillo de seguridad” de España. Suyo era el puesto de escudero de los Xavi, Iniesta y Silva… hasta que Ronald Koeman llegó a Valencia. El holandés, no se sabe muy bien por qué, apartó del equipo a los veteranos Cañizares, Angulo y Albelda, que se acabó cayendo de la lista de Luis a base de no jugar. Angulo emigró a Portugal. Cañizares decidió cambiar la portería por el plató de televisión e Instagram. Koeman se fue con una Copa del Rey bajo el brazo. Y Albelda siguió jugando, pero nunca más de rojo.