lunes, 17 de enero de 2011

Puntualizaciones sobre Benítez

Por Rocheteau
Hoy voy a zumbarle a Rafa Benítez yo también. No porque me hayan entrado ganas de parecerme a John Carlin, qué va. Más bien es la curiosidad de experimentar qué se siente. Digo yo que tiene que ser placentero, viendo tantas personas apuntadas al pimpampún contra el entrenador madrileño.

Lo peor que ha hecho, sin duda, es ganar, que en España es de mal gusto. Ganar mucho. Ganar la final más apasionante y difícil de la historia de la Champions. Ganar con casi todos sus equipos, echando por tierra ese axioma español de que si no juegas al fútbol siguiendo los preceptos del tiki-taka vivirás como un impuro. Desafiar a los mulás del periodismo deportivo, a los Cayetano Ros, a los Ramón Besa, es una desobediencia que tiene consecuencias en forma de fatua.

Desde luego, Rafa Benítez ha cometido muchísimos errores en su carrera. Enumeraré sólo alguna de sus tropelías. Recuerdo cuando Albert Riera se fue al Olympiakos, echando pestes de él tras salir rebotado de Anfield porque había dejado de jugar. Benítez demostró ser un torpe no filtrando a la prensa que Riera había agarrado por el cuello y amenazado a un jovencillo del equipo B, Dani Pacheco.

Por no hablar de su insensibilidad. Cuando el agente de Xabi Alonso deslizó en algunos periódicos que Benítez no había permitido a su jugador acudir al parto de su mujer, Rafa erró de pleno. Bastaba haber explicado que fue él quien instó a Xabi a estar presente en el parto, pero explicándole que después de una emoción y un viaje así, lo lógico era que un compañero ocupase su puesto y él pudiese dedicarse a su familia.

Florentino intentó ficharlo

Como gestor tampoco suelen salirle las cuentas. Al Liverpool le perdonó varios millones de libras al abandonar su puesto, sabedor de la situación económica del club. Al Inter, lo mismo, para conseguir que se firmase la indemnización del resto de colaboradores de su equipo técnico.

Si hablamos de imagen pública, coincidiremos que es donde más dificultades tiene el entrenador madrileño. Por ejemplo, si hubiese filtrado que Florentino Pérez intentó ficharlo dos veces el verano en que el Madrid terminó firmando a Pellegrini, seguro que su cartel habría mejorado en algunos cenáculos madrileños.

Con el Inter de Milán se demostró de nuevo que Rafa Benítez está abocado al fracaso. Aceptó el puesto a condición de que Moratti hiciese tres fichajes con los que fomentar la competencia en una plantilla entradita en años que venía de ganarlo todo. Él, al estilo inglés, se había asegurado de pactar el sí de los jugadores y las cantidades de los traspasos de Javier Mascherano, Dirk Kuyt y Patrice Evra. Moratti faltó a su palabra. Benítez ya había dado la suya. Nunca dejó al presidente por mentiroso. Cavó su propia tumba.

Con estos pequeños ejemplos a vuelapluma uno está obligado a deducir que Benítez, a pesar de ascender a Extremadura y Tenerife, a pesar de sus dos ligas y su UEFA con el Valencia, de su Liga de Campeones con el Liverpool, de sus dos títulos en seis meses con el Inter, es evidentemente un tipo con carencias. Un entrenador que se merece que le zurren día sí y día también en los medios españoles.

Es curioso, cuando echaron a Benítez, tras 17 jornadas, Louis Van Gaal, finalista de la Liga de Campeones con el Bayern de Munich, estaba a muchos más puntos del Borussia de Dortmund que el Inter del líder del calcio. El holandés sigue entrenando al Bayern.

¿Defensivo y malo fichando?

Hay dos grandes críticas que suelen hacérsele por definición a Rafa Benítez, su juego supuestamente “defensivo” y su poco tino con los fichajes. Subjetivamente, pienso que con él al cargo, el Liverpool compró a Reina, Torres, Mascheranno, Kuyt, Benayoun, Árbeloa, Xabi Alonso… jugadores cuyo valor para el Liverpool compensa otros fichajes fallidos como Josemi, Núñez, Babel o Voronin.

Objetivamente, lo mejor es revisar esta tabla. En seis años en el Liverpool, los Reds gastaron 229 millones de libras en fichajes y vendieron por 148 millones. En la tabla falta la venta de Mascherano por 22 millones de euros al Barcelona, teniendo en cuenta que fue un activo generado por Benítez. O sea, que no son 148, sino 170 millones. La diferencia son 49 millones de euros de gasto real. En seis años. Menos de lo que sacará el Liverpool este verano cuando Torres no aguante más y se vaya. Ése es el dispendio.

Además, muchos de los fichajes fallidos que se le imputan son obra del manager Rick Parry, como Robbie Keane. Alguien me comentó un día que Rafa Benítez suele dar cinco nombres, según cinco escalones de coste, por cada fichaje. Cuando pidió a Dani Alves, llegó Jermaine Pennant. Cuando sugirió a Vidic, le trajeron a Kirgyakos. And so on…

Vayamos con el juego defensivo. Cuando a él se le menciona el tema, además del resoplido, una palabra surge como credo de su estilo de juego: equilibrio.

Es decir, reducir los riesgos. Lo primero que cabe pensar es: ¿y qué? ¿Hay un único modo de jugar al fútbol? Sólo que llamarle defensivo es ignorar la realidad. Desde luego, el planteamiento de Benítez no es ofensivo, si por ofensivo se entiende la actitud respetable pero temeraria de “lo importante es jugar bonito”. Lo que no hace es basar el ataque en la posesión del balón, idea erróneamente asociada en España a “ofensivo”. Pero tienen que sentirse fatal los Wenger, Ferguson y compañía, porque Benítez el “defensivo” acabó la temporada 2008-09 con su Liverpool como equipo más goleador.

Pero da igual. Hay tipos que siempre se llevan todas las castañas cuando hay una pelea y Benítez es uno de ellos. Se anuda peor la corbata que otros. Evita manejar y cortejar a periodistas. Y además es un tipo honesto. Quizás por eso le zurran todavía más.

5 comentarios:

  1. Muy grande este artículo, mucho. Sin embargo en Valencia sí ficho mal; el resto del artículo lo firmaba yo mismo.

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  2. le ficharon una mesa y una lámpara

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  3. Gran artículo, es un placer ver que hay alguien que sabe ver los meritos de un entrenador español lejos de la borachera de nacionalismo español que vivimos. Solo seras reconocido si ganas un mundial o 6 titulos en una misma temporada. Ah y obviamente si lo logaras en España. Por que ser entrenador de la Premier League a los 36 años tras hacer carrera en un país extrajero eso no tiene ningun merito verdad.... Dicho esto, aprovecho para dar mi pequeño homenaje a dos entrenadores que de una manera u otra han trinufado en el fñutbol ingles. Grandes Rafa Benitez y Roberto Martinez.

    Por cierto muy buen blog. Un saludo desde www.futbol-britanico.blogspot.com

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  4. muy bueno, verdades como puños, posiblemente el entrenador español que más ha hecho con plantillas ciertamente inferiores a sus competidores. Y aquí parece que no existiese. Lo que pasa que él se dedica más a trabajar y se deja de tanto mamoneo que hay, pero ésto es España así que a la gente trabajadora no se la valora mucho, hacemos más caso a los lloricas y lameculos.

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  5. No quiero parecer que me subo al carro, pero es que lo que cuentas es la pura realidad.
    Grande Benitez, tiene todo un futuro por delante, es un chavalillo.

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